En un cálido verano
el sueño se ha terminado
mi corazon de vampiro no me deja ver más allá
de las sombras...
me siento entre la luz y las sombras
tu mirada me alumbra
mientras tu corazón me hiere
tanto silencio y tanta paz me hace sentir en el paraíso
del edén...
bebiendo de las sombras
junto a la puerta de mi prisión
aquel angel oscuro dice entre lamentos y susurros

"la entrada del paraiso... es el infierno del condenado..."

Esa silueta se acerca a mi
una nube de ideas nubla mi cabeza mientras juega con mi mente
aquella luna que me mata a cada segundo
está rodeada de mariposas de negras alas,
entre bruma, entre espádas,
entre lamentos y carcajadas,
se oye a aquel angel oscuro decir:

"la entrada del paraíso... es el infierno del condenado"

Estoy encadenada a una eterna flama...
mi guerra la he saboreado de cerca
tu sangre la he probado,
mi miedo ha desaparecido
sabiéndote a mi lado

Y... aunque el mundo me mira con desprecio
y se muta a cada momento
no olvidaré la promesa que con sangre en mi delirio firmé:

"POR SIEMPRE"

Mi amo y señor me dió un corazón
más aquel ser supremo no me dió el amor...

mi corazón es solo un punto débil al que la eternidad amenaza...
con trizteza...

La oscura silueta me asecha de nuevo
predica "final y miseria"

y al escucharla...
entre risas, silencio...
y carcajadas...
entre cenizas y estacas...
aquella serpiente de hueso
aclama:

"la entrada de paraiso... es el infierno del condenado..."